Más
noticias que se vuelven viejas en menos de 24 horas
Para el politicólogo André Singer, algunos factores como la llamada delación premiada de Delcídio Amaral,
ex-líder del PT en el senado y acusador principal hoy de Lula y Dilma, así como
la condução coercitiva (detención ostensiva
y por la fuerza) de Lula forman parte de la misma “operación masacre” por parte
de los medios de comunicación que culminaron en las manifestaciones masivas de la
clase media en todo el país el 13 de marzo pasado:
"No nos espanta que, delante de esa masacre electrónica, sectores
de la derecha y del centro hayan decidido olvidar los graves problemas (jurídicos)
que pesan sobre el Impeachment y producido, el 13/3, la mayor manifestación de
la história política de Brasil por la salida de Dilma y la prisión de Lula. A
partir de ese momento, legitimado por las calles, el Impeachment empieza a
andar. ¿Una gran coincidencia?", se pregunta Singer.
Y
mientras tanto,
Mientras tanto, el presidente del PMDB de Rio de Janeiro y de la
Asamblea Legislativa del estado, Jorge Picciani, repitió que el directorio del partido
está de acuerdo en romper con el gobierno de Dilma Rousseff y que deberá votar
de ese modo en la reunión que el directorio nacional va a realizar el martes de
la semana próxima. Es una reunión clave para el futuro del gobierno Dilma, y para
la evolución del proceso de Impeachment en la cámara de diputados, espacio en donde
el PMDB tiene la bancada más grande, que venía dividida hasta ahora entre una derecha
feroz contra el gobierno y un centro que lo apoyaba tímidamente.
Picciani dice además, que el PMDB de Rio tenía una posición distinta, de
defensa del gobierno, pero "el panorama cambió".
"Es necesario
que, en el régimen presidencialista, podamos salir de las discrepancias para algunos
consensos mínimos y, desgraciadamente, ella – la presidenta Dilma- no logró
construir esta posibilidad", dice Picciani.
"¿Ella tiene capacidad de
salir de las discrepancias para el consenso mínimo? ¿Puede aprobar un ajuste
fiscal y recuperar la economia? ¿Recuperar el empleo? No, no lo tiene. La
presidente es una persona honrada, pero el conjunto de su obra no es
bueno", completó el dirigente Del PMDB de Rio de Janeiro.
Mientras tanto, la Operación Lava
Jato se desarrolla siguiendo una narrativa que deberá terminar –en el guión
detallado de sus autores- con Lula detenido y responsabilizado por un
megaesquema de corrupción que lo acusan de Haber montado para financiar el mantenimiento
del PT en el poder.
Pero ocurre que algunos hechos recientes amenazan el curso normal de ese
tal relato y su guión, como la amplia lista de políticos favorecidos por
donaciones que fue divulgada “sin querer” esta semana pasada.
La lista, sin embargo, quedó rápidamente bajo el secreto de sumario del
juez Sergio Moro, porque, como queda claro, lo que está surgiendo a flote es un
sistema de financiamiento de la política a partir del estado, -opuesto al
financiamiento público, transparente y lícito que propuso el gobierno y fue
derrotado- que genera y retroalimenta la corrupción a favor de todos y de cualquiera
de los partidos de la oposición que eventualmente suban al poder.
La consigna del momento entre las clases dirigentes y sus políticos de la
oposición es “pacto”; un arreglo para que se apruebe el Impeachment y que todos
los que están involucrados en la financiación ilegal de campañas se escapen -PSDB, DEM y toda la oposición en peso-, lo
más rápido que les sea posible.
Pero con ese pacto las calles no van a estar de acuerdo ni la militancia
de izquierda y de los movimientos sociales que combaten el golpe, ni aquellos
que, poniendo el foco en su odio a Dilma y el PT, quieren ir a fondo, aunque lo
vean desde uma óptica más a la derecha que la propia oposición.
Javier Villanueva. São Paulo, 26 de marzo de 2016.
Nenhum comentário:
Postar um comentário